Política

LA COMPAÑERA INCANSABLE

Nos dejó Elsa Insaurralde a sus 83 años, militante de La Cámpora Liniers desde 2012. Una luchadora incansable que junto a su compañero nos mostró día a día su ejemplo de militancia y compromiso social.

por La Cámpora

23 ene 2021

Hubo quienes nunca, a pesar de las bombas y los fusilamientos, dejaron de creer en la política como herramienta para mejorar la vida de la gente, del pueblo. Quienes nunca bajaron sus banderas, ni se achicaron ante nada ni nadie. Elsa (Irma) Insaurralde fue el claro ejemplo de esos quienes. Una mina de hierro que supo no tenerle miedo a nada, que cuando perdimos elecciones y los más jóvenes no podíamos de la tristeza, nos levantaba con un abrazo y palmaditas amorosas preguntando qué actividad teníamos al otro día. Quien te seguía media cuadra para darte un volante de Precios Cuidados o a sus 83 pirulos hacía bajo puerta aunque le dijéramos que se cuide. Hoy se nos fue, pero sus compañeros y compañeras nos quedamos con lo más lindo que nos regaló: esa alegría, esa fuerza. Nos reímos de los que dicen que esto es cosa de jóvenes. Díganselo a ella, que a su edad no dudó, no pensó ni un segundo que la pasividad era una opción. Se sumó a militar en La Cámpora (en la Unidad Básica de su barrio, Liniers), fue por primera vez en su vida oficialista y, junto a su compañero de toda la vida Oscar, participó de plenarios enteros, peñas, patios de Casa Rosada con la Jefa. ¡Cuánto la amabas y defendías a Cristina! Nos vamos a volver a ver compañera Elsa, pero mientras tanto te vamos a extrañar muchísimo. ¡Hasta la Victoria siempre!

Imágenes

Del sueño de la gratuidad a la pesadilla del arancelamiento

Un 22 de noviembre como hoy, pero de 1949, el presidente Juan Domingo Perón dictó el decreto N° 29.337 que eliminó el cobro de aranceles en las universidades, inaugurando entonces una nueva etapa en la historia de la Universidad Argentina: la del ingreso de los hijos e hijas de trabajadores a aquel lugar donde antes solo estaba permitido el oligarca.

Soberanía ayer, hoy y siempre

Cuando hablamos de soberanía nacional no apelamos a un sentimentalismo abstracto ni recitamos de memoria el calendario de las fechas patrias. Reivindicamos los símbolos por lo que valen y lo que representan. Recordamos las grandes gestas porque encontramos en ellas parte de lo que somos, porque vemos ahí muchos de los problemas y desafíos que tenemos por delante. Como militantes políticos nos interesa menos la historia fosilizada de los museos que la historia viva, donde el pasado se entrelaza con el presente y tiene siempre algo para decirnos; donde el presente se abre al pasado y asume la responsabilidad de hacer justicia por los que ya no están.

Por más que no les guste, estamos

Hebe saluda desde una camioneta. Tiene los labios pintados de rojo, su pañuelo blanco anudado al cuello, y una pechera que dice todos somos Cristina. “Vinimos a acompañar a los que están acompañando. No somos tan jóvenes pero todavía podemos cuidarla”. Su hablar es firme, consistente, inalterable. Sabe a qué fue. Siete horas después, en ese mismo sitio donde Hebe se hace presente, en la puerta de Juncal, Sabag Montiel va a intentar matar a Cristina.