La crisis de la industria automotriz no se detiene
Fiat deja de producir cajas de cambio en el país, despidiendo 300 trabajadores y trabajadoras. Volkswagen, por su parte, suspende a 300 operarios y operarias por lo que resta del año.
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La Cámpora
20 mar 2019
Ambas multinacionales se suman a la crisis del sector que para hacer frente a la recesión desencadenada por el gobierno de Mauricio Macri ajusta en sus trabajadores y trabajadoras.
La empresa italiana Fiat ya había suspendido a comienzos del mes en curso a 2.000 empleados y empleadas de la planta de Ferreyra, Córdoba, quienes sostenían un régimen horario reducido. En la actualidad la firma italiana dejaría de producir cajas de cambio desvinculando a 300 empleados, a quienes se les ofrecerían retiros voluntarios. Sus instalaciones han sido visitadas por el presidente en dos oportunidades desde que asumió.
La empresa alemana Volkswagen, por su parte, comenzó un plan de suspensiones rotativas en su planta de Pacheco. Una vez concluido el mes, les tocará su turno a otros 300 trabajadores y trabajadoras. Cabe destacar que el total del personal ya viene realizando jornadas reducidas, no concurriendo a la fábrica dos veces a la semana, con la baja salarial que esto conlleva.
La caída de ventas, con la consecuente acumulación de stock, generó que la reforma laboral ya esté aplicada en el sector, donde día a día se conoce una nueva automotriz que suspende empleados o reduce sus horarios, realiza retiros voluntarios o directamente debe cerrar sus puertas. Este último fue el caso de Metalpar, la principal fábrica de carrocerías del país, donde 600 trabajadores y trabajadoras quedaron en la calle el último 28 de febrero.
En este sentido, General Motors trabaja con un turno suspendido desde septiembre y así seguirá en principio hasta mayo; trabajando de forma rotativa sus 500 empleados y empleadas en cada semana del mes.
Honda, por su parte, mantiene las puertas de su fábrica de Campana cerradas durante al menos todo el mes en curso, afectando a sus 700 trabajadores y trabajadoras.
Del mismo modo, Peugeot tiene suspendidos durante los meses de marzo y abril a sus 1000 empleados de la fábrica del Palomar, reinaugurada hace 2 años por el presidente Mauricio Macri. En esa oportunidad, el primer mandatario sostuvo que el Gobierno había logrado un acuerdo multilateral con el sector automotor para producir "un millón de automóviles y generar más de 30 mil nuevos puestos de trabajo, además de cuidar los que tenemos". Asimismo, subrayó que las inversiones representaban una "Demostración de confianza a ese camino que empezamos a construir hace 15 meses". Pero pasaron cosas.
En Córdoba, Renault anunció la suspensión de 1.500 trabajadores y trabajadoras durante la primera semana de este mes. Lo mismo ocurrió con la fábrica de camiones Iveco, en Ferreyra, que suspendió a sus 900 operarios y operarias por los últimos 21 días del mes en curso, al tiempo que inició un proceso de retiros voluntarios, con el objetivo de realizar una reducción de personal de forma permanente.
En todos los casos, cuando las trabajadoras y trabajadores son suspendidos, cobran un 70 ó 75% del salario neto, viendo duramente perjudicado el poder adquisitivo de su grupo familiar.
A fines del año pasado, el titular del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), Ricardo Pignanelli, anticipó que "en los próximos meses se van a perder 15 mil puestos de trabajo en el sector automotriz" a causa de la recesión que mantiene las plantas semi paralizadas. En lo que va del año, ya suman casi 8 mil los trabajadores y trabajadoras del sector que fueron despedidos o suspendidos, en línea con lo planteado por el sindicalista.
La asociación de concesionarios de automotores (Acara) destacó que la venta de autos 0 kilómetro cayó un 42,8% en febrero frente a igual mes de 2018, acumulando una caída del 47,5% en el primer bimestre del año. A su vez, la asociación de fabricantes (Adefa) indica que la producción se desplomó un 16,4% en febrero, con una baja interanual del 22,1% en los dos primeros meses del año en curso. Durante los meses de enero y febrero de este año, se fabricaron 47.465 unidades de vehículos, frente a las 60.943 producidas en igual período de 2018. Asimismo, el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) reveló que el 2018 cerró con un volumen de vehículos fabricados de 16,5% menos respecto al 2015.
