propuesta de “Despojar de nuestras cabezas las cadenas culturales que durante tanto tiempo nos han metido. Porque muchas veces nos hacen ver las cosas no con el cristal de la Patria, sino con el cristal de los intereses de otros".
Convencidos de que la “batalla culturalˮ se da todos los días y en todas partes, los compañeros de La Cámpora en Mendoza continúan trabajando en los barrios para demostrar que a hay que seguir dando la batalla cultural en todos los rincones de la provincia. Esta vez fue el turno de la plaza del Barrio Covimet del Distrito Las Tortuguitas de Godoy Cruz el 12 de febrero pasado.
Ante la sorpresa de los vecinos, la plaza fue tomando poco a poco un colorido distinto que lo diferenció de los típicos domingos apacibles mendocinos. Hasta allí se acercaron numerosos compañeros de Godoy Cruz con sus banderas, música, pinturas y la energía que los caracteriza para llevar adelante el Abanico Cultural que consiste precisamente en ofrecer un gama de posibilidades recreativas y culturales a las familias a través de la realización de postas con diferentes propuestas para todos.
En las primeras horas de la tarde se sentía que algo diferente iba a ocurrir: los pinceles y los tarros de pintura hicieron su aparición. Se eligió una pared lindante con la escuela barrial, y tres muralistas de la zona convocados por la agrupación comenzaron a desplegar su tarea creativa en ese muro que pedía a gritos ser intervenido. Pero no sólo pintaron los muralistas. Mientras tanto, en el corazón de la plaza, los niños se entretenían siguiendo atentamente la lectura de cuentos de la escritora argentina María Elena Walsh con la consigna que, después de la narración, se abocaran a pintar lo que les había quedado de los relatos. Y así lo hicieron. Sentados en ronda, cada uno recibió una gran hoja de papel, y crayones para expresarse libremente.
La idea de la actividad es brindar a todos los compañeros las herramientas para que se trabaje en cada barrio, teniendo en cuenta las característica particulares de cada zona. “Lo principal es ayudar a recuperar el trabajo colectivo, la interacción con los vecinos, escuchar las problemáticas y en definitiva recuperar los espacios públicos que son de todosˮ explicaron los compañeros.
Es así que para que las actividades llegaran también a los más grandes se propuso una clase de folclore. El Gato Cuyano fue el baile elegido por los compañeros que siguieron con atención las indicaciones de la profesora en la hermosa tarde vivida en el Covimet. Si bien la timidez de los vecinos hizo que pocos participaran activamente, muchos padres aportaron sus palmas y entusiasmo ante el espectáculo reunidos alrededor de los bailarines.
Ya mediando la tarde, mientras la actividad de los muralistas continuaba ferviente y se podía visualizar el esbozo del “Nestornautaˮ en un paisaje urbano, continuaban las actividades en la plaza.
Los músicos de Cruz Negra, provenientes del barrio Las Palmares, y la murga Sendero Luminoso tuvieron un lugar de privilegio para hacerse conocer y expresar su arte. Entrada la noche llegaron las empanadas criollas horneadas por algunos compañeros de La Cámpora. Una larga jornada de la que participaron los compañeros Diputados Provinciales Lucas Ilardo y Marina Femenía, y también de la compañera Diputada Nacional Anabel Fernández Sagasti.
Una jornada que dejó la satisfacción en todos los compañeros de haber aportado un granito de arena para continuar trabajando por la recuperación de los espacios públicos, y de los lazos sociales.
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Convencidos de que la “batalla culturalˮ se da todos los días y en todas partes, los compañeros de La Cámpora en Mendoza continúan trabajando en los barrios para demostrar que a hay que seguir dando la batalla cultural en todos los rincones de la provincia. Esta vez fue el turno de la plaza del Barrio Covimet del Distrito Las Tortuguitas de Godoy Cruz el 12 de febrero pasado.
Ante la sorpresa de los vecinos, la plaza fue tomando poco a poco un colorido distinto que lo diferenció de los típicos domingos apacibles mendocinos. Hasta allí se acercaron numerosos compañeros de Godoy Cruz con sus banderas, música, pinturas y la energía que los caracteriza para llevar adelante el Abanico Cultural que consiste precisamente en ofrecer un gama de posibilidades recreativas y culturales a las familias a través de la realización de postas con diferentes propuestas para todos.
En las primeras horas de la tarde se sentía que algo diferente iba a ocurrir: los pinceles y los tarros de pintura hicieron su aparición. Se eligió una pared lindante con la escuela barrial, y tres muralistas de la zona convocados por la agrupación comenzaron a desplegar su tarea creativa en ese muro que pedía a gritos ser intervenido. Pero no sólo pintaron los muralistas. Mientras tanto, en el corazón de la plaza, los niños se entretenían siguiendo atentamente la lectura de cuentos de la escritora argentina María Elena Walsh con la consigna que, después de la narración, se abocaran a pintar lo que les había quedado de los relatos. Y así lo hicieron. Sentados en ronda, cada uno recibió una gran hoja de papel, y crayones para expresarse libremente.
La idea de la actividad es brindar a todos los compañeros las herramientas para que se trabaje en cada barrio, teniendo en cuenta las característica particulares de cada zona. “Lo principal es ayudar a recuperar el trabajo colectivo, la interacción con los vecinos, escuchar las problemáticas y en definitiva recuperar los espacios públicos que son de todosˮ explicaron los compañeros.
Es así que para que las actividades llegaran también a los más grandes se propuso una clase de folclore. El Gato Cuyano fue el baile elegido por los compañeros que siguieron con atención las indicaciones de la profesora en la hermosa tarde vivida en el Covimet. Si bien la timidez de los vecinos hizo que pocos participaran activamente, muchos padres aportaron sus palmas y entusiasmo ante el espectáculo reunidos alrededor de los bailarines.
Ya mediando la tarde, mientras la actividad de los muralistas continuaba ferviente y se podía visualizar el esbozo del “Nestornautaˮ en un paisaje urbano, continuaban las actividades en la plaza.
Los músicos de Cruz Negra, provenientes del barrio Las Palmares, y la murga Sendero Luminoso tuvieron un lugar de privilegio para hacerse conocer y expresar su arte. Entrada la noche llegaron las empanadas criollas horneadas por algunos compañeros de La Cámpora. Una larga jornada de la que participaron los compañeros Diputados Provinciales Lucas Ilardo y Marina Femenía, y también de la compañera Diputada Nacional Anabel Fernández Sagasti.
Una jornada que dejó la satisfacción en todos los compañeros de haber aportado un granito de arena para continuar trabajando por la recuperación de los espacios públicos, y de los lazos sociales.
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