Política

Palos por defender el trabajo

La represión violenta contra los trabajadores y trabajadoras de Pepsico en Vicente López demuestra -otra vez- el verdadero y único objetivo de Macri: suprimir derechos de los trabajadores para garantizarle la maximización de las ganancias a un grupito de empresarios amigos.

por La Cámpora

13 jul 2017

Esta vez ni siquiera usaron el fantasma de las “caras tapadasˮ o “los armados con palosˮ como justificación para usar la fuerza contra quienes solo quieren defender su derecho a trabajar. Armaron un operativo impresionante con miles de policías para pegarle a hombres y mujeres que, como otros cientos de miles, están quedando sin trabajo por la decisión de Macri de abrir todas las importaciones. La violencia y la persecución a los que protestan son las únicas respuestas que tiene este Gobierno para el que pretenda levantar su voz contra este modelo injusto y arbitrario que solo beneficia a Macri, a sus amigos y testaferros y a las trasnacionales que van moviendo sus “inversionesˮ donde más puedan explotar a la gente. Ante la grave situación y el temor que están viviendo miles de familias bonaerenses y de todo país, por la creciente incertidumbre de poder mantener sus fuentes de trabajo, rechazamos que la única respuesta de los gobiernos Macri y Vidal sea la inacción frente a los abusos que cometen las empresas transnacionales y el uso de la fuerza para reprimir a quienes protestan. En este sentido, llamamos a la reflexión de las autoridades de gobierno al tiempo que instamos al presidente Mauricio Macri y a la gobernadora María Eugenia Vidal a honrar sus promesas de diálogo y poner en funcionamiento desde los Ministerios de Trabajo de ambas jurisdicciones, todas las herramientas institucionales y recursos que tengan a disposición para evitar la pérdida de las fuentes de trabajo de los argentinos y argentinas.

Imágenes

Del sueño de la gratuidad a la pesadilla del arancelamiento

Un 22 de noviembre como hoy, pero de 1949, el presidente Juan Domingo Perón dictó el decreto N° 29.337 que eliminó el cobro de aranceles en las universidades, inaugurando entonces una nueva etapa en la historia de la Universidad Argentina: la del ingreso de los hijos e hijas de trabajadores a aquel lugar donde antes solo estaba permitido el oligarca.

Soberanía ayer, hoy y siempre

Cuando hablamos de soberanía nacional no apelamos a un sentimentalismo abstracto ni recitamos de memoria el calendario de las fechas patrias. Reivindicamos los símbolos por lo que valen y lo que representan. Recordamos las grandes gestas porque encontramos en ellas parte de lo que somos, porque vemos ahí muchos de los problemas y desafíos que tenemos por delante. Como militantes políticos nos interesa menos la historia fosilizada de los museos que la historia viva, donde el pasado se entrelaza con el presente y tiene siempre algo para decirnos; donde el presente se abre al pasado y asume la responsabilidad de hacer justicia por los que ya no están.

Por más que no les guste, estamos

Hebe saluda desde una camioneta. Tiene los labios pintados de rojo, su pañuelo blanco anudado al cuello, y una pechera que dice todos somos Cristina. “Vinimos a acompañar a los que están acompañando. No somos tan jóvenes pero todavía podemos cuidarla”. Su hablar es firme, consistente, inalterable. Sabe a qué fue. Siete horas después, en ese mismo sitio donde Hebe se hace presente, en la puerta de Juncal, Sabag Montiel va a intentar matar a Cristina.