La crisis climática es una realidad y los incendios forestales son una de las consecuencias más claras. El fuego en Neuquén, Río Negro y Chubut no da tregua y está arrasando con miles de hectáreas, poniendo en riesgo la vida de personas, viviendas y biodiversidad en general. Frente a esto, un Gobierno Nacional que, bajo el pretexto de que “el cambio climático es un invento del socialismo”, desfinanció todas las políticas ambientales en general y las de manejo del fuego en particular.