Política

Señal de ajuste

por La Cámpora
20 mar 2010

Al iniciar su discurso, la compañera Presidenta rindió homenaje a Felipe Sapag, ex gobernador de Neuquén fallecido hace dí­as en su provincia. "Fue uno de los fundadores de esta Neuquén contemporánea", expresó.

Luego, recordó que la construcción del dique Ballester "permitió la fundación de una de las economí­as más importante de la Patagonia, como lo es la del Alto Valle de Neuquén y Rí­o Negro". Y en ese marco, resaltó que la obra, impulsada por hombres que quizá tuvieron una visión de paí­s diferente a la de su administración, es una muestra del tipo de emprendimiento que el paí­s necesita para crecer.

Por eso, defendió a la obra pública como herramienta para "transformar la vida de la gente" y en ese sentido sostuvo que "estamos trabajando como corresponde para mejorar siempre la calidad de vida de los argentinos".

También recordó que desde su gestión se consagró por ví­a de la ley que los jubilados reciban dos aumentos anuales, se devolvió a los sindicatos poder para negociar en paritarias y se estableció la asignación universal por hijo, hechos que - dijo - también han modificado la realidad de miles de argentinos. "Este gobierno vino a reparar y devolver derechos, por eso tengo enemigos poderosos, porque los trabajadores están conmigo", aseveró la Mandataria. Y agregó, en referencia a los trabajadores que asistieron al acto: "Los voy a representar siempre, y siempre voy a estar al lado de los más vulnerables, de los que menos poder de lobby tienen".

Además, sostuvo que "somos el gobierno que ha construido el piso de protección social más importante", al tiempo que se manifestó orgullosa de "haberle devuelto a este paí­s el honor de ser un lugar donde se respetan los derechos humanos, es un ejemplo en el mundo en este aspecto, y también estamos logrando dejar atrás aquel 2001, donde los que se fueron en helicóptero y los que declararon el default después, nos dejaron un paí­s en llamas".

"Quiero devolverle a la Argentina el nombre que alguna vez tuvimos en el mundo, que no nos conozcan como los que no pagan lo que deben o los que no respetan los derechos humanos", expresó Cristina Fernández. En ese sentido recordó también que "en 2005, por primera vez en la historia, cuando se negoció la deuda del paí­s se pagó mucho menos que lo que decí­an los papeles, porque en esos papeles habí­a mucha trampa". Y que "durante estos 7 años hemos venido profundizando el desendeudamiento del paí­s".

Agregó entonces que "queremos seguir desendeudándonos con la plata que también hemos juntado durante este gobierno los argentinos". "Parece mentira, pero recibimos la Argentina con apenas 8 mil millones de reservas, hemos trabajado y las hemos hecho crecer en 50 mil millones de dólares, y hoy queremos utilizar una pequeña porción de esas reservas, y los que nos endeudaron, los que las vaciaron , incluí­dos los que defaultearon, no nos quieren dejar hacerlo", lamentó.

Por ese motivo, manifestó: "estoy abierta a toda propuesta para pagar la deuda, pero con dos condiciones, que no nos endeuden más y que no le hagan pagar la deuda que contrajeron 4 vivos a todos los argentinos"

"Conmigo con el ajuste no vengan, porque yo no voy a ajustar en Argentina", sentenció la Mandataria.

Asimismo, destacó la "solidez" del modelo impulsado desde su gobierno plasmada en los buenos números que arrojan los mercados financieros de cara a cada medida económica que se adopta. "Un paí­s tiene que ser serio, responsable y dar certeza de que vamos a pagar, y lo vamos a hacer sin ahogar el consumo", explicó a la multitud que acompañó el acto la Presidenta.

"La Argentina se ha vuelto a poner de pie, y por eso algo de confianza me tienen que tener", dijo la Jefa de Estado, y agregó: "Ha pasado el año más difí­cil de la economí­a en el mundo y esta Presidenta piloteó la tormenta ayudada por un equipo de gobierno y por legisladores que también entendieron la necesidad de seguir profundizando el proceso de renovación y cambio".

"No tenemos que perder esta oportunidad magní­fica del bicentenario de pensar un paí­s diferente, un paí­s industrializado con valor agregado, y por eso estoy dispuesta a dar todas las discusiones polí­ticas, todos los debates, pero quiero que discutamos ideas, proyectos concretos, y si son mejores que los nuestros, los vamos a llevar adelante", concluyó su exposición la Mandataria.

La visita

En Neuquén, la primera mandataria recorrió las instalaciones de la firma "Moño Azul" que produce y comercializa manzanas. Luego, descubrió un monolito junto a intendentes, docentes y estudiantes de escuelas de la zona.

Desde allí­, la jefa de Estado se trasladó hasta el Dique Ballester, ubicado a unos 30 kilómetros de la capital neuquina, para encabezar el acto conmemorativo del centenario de esta obra que está emplazada entre Neuquén y Rí­o Negro y divide las dos provincias. Esta actividad es parte de los festejos por el Bicentenario.

Además, Cristina Fernández recorrió una feria de productos regionales y artesanales en el municipio rionegrino de Contralmirante Cordero, donde se desarrollará el Festival por el Bicentenario hasta el domingo.

Acompañaron a la Presidenta en el acto el gobernador de la provincia de Rí­o Negro, Miguel íngel Saiz; el gobernador de la provincia de Neuquén, Jorge Sapag; el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; el senador nacional por el Frente para la Victoria Miguel íngel Pichetto; el intendente municipal de contraalmirante Cordero, Héctor Galli; el intendente municipal de Vista Alegre; Marcelo Pieroni; el intendente municipal de Centenario, Javier César Bertoldi, e invitados especiales.