Política

Yo... ¿y vos?

por La Cámpora
16 sep 2011
Leí­mos a un Pepe Eliaschev. (ver nota) compungido, apenado y preocupadí­smo por la excesiva utilización que la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner hace de la palabra “yoˮ. Palabra que utiliza para referirse, nos explica Eliaschev magistralmente, a ella misma. Como casi todos los que utilizan, claro, la palabra yo. Que para eso ha sido inventada. Nos explica el complejí­simo cálculo matemático que ha tenido que descifrar el periodista: “En ambas intervenciones usó un total de 9.074 palabras. Entre ellas dijo “yoˮ 42 veces, una vez cada 216 palabras, una autorreferencialidad insuperableˮ. Una vez cada 216 palabras, dice Pepe que dice Cristina la endemoniada y polémica palabra: “yoˮ. Es una linda forma de expresarlo, y quizás la única en la que genera algún impacto. Quizás no reforzarí­a demasiado la hipótesis de Eliaschev, de que Cristina dice yo a cada ratito (luego, es egocéntrica; luego, no puede gobernar el paí­s en tanto se supone, Cristina, por encima del Estado por decir la palabra “yoˮ; luego, qué hace el 50,27% del padrón electoral votándola, en vez de leer su columna en Perfil), si uno la expresara de la siguiente manera: “En sus últimos dos discursos, Cristina Kirchner utiliza la palabra ´yo ´, en el 0,46% de las oportunidadesˮ. O, más flojita: “Cada 100 palabras, Cristina Kirchner dice yo un 0,46 de las vecesˮ. Mucho más duro, casi destruyendo la idea de autorreferencialidad, serí­a presentar cuáles fueron las palabras que más usó Cristina, en vez de elegir una, al azar, descontextualizarla y mostrar un discurso público como un sí­ntoma psí­quico que, también, redundarí­a en una cuestión polí­tica. Pero hay una forma de periodismo, que tiene casi todo de columna de opinión y casi nada de periodismo,     que no tiene tiempo de contextualizar. Es difí­cil, lo reconocemos, cortar y pegar el discurso en un programita ya diseñado y fijarse cuáles son las palabras que más usó Cristina en esos dos discursos que cita Eliaschev. Como servicio a la comunidad y por qué no a ese periodismo demasiado urgente, acá van: Quien escribe no se anima a hacer psicoanálisis de tribuna, porque no tiene tí­tulo profesional ni columna de opinión que llenar por falta de temas. Pero sí­ se atreve a mirar la nube de palabras y notar que hay una referencialidad bastante manifesta y que no es de Cristina Kirchner consigo misma. Aunque para eso no hací­a falta una nube de palabras.