El diputado nacional, Máximo Kirchner, presentó ayer, en una entrevista en Radio con Vos, con Alejandro Bercovich, los ejes de un nuevo proyecto legislativo que apunta directamente al corazón de uno de los problemas más estructurales de la economía argentina: la fuga de capitales. Se trata del Impuesto a las Grandes Transferencias Internacionales de Capital (IGTIC), una herramienta que busca gravar las salidas de divisas por canales cambiarios, bursátiles o digitales, con el objetivo de recuperar parte de lo que se va para invertirlo en hospitales, universidades, jubilaciones y obras públicas.
Máximo en Radio con Vos
“Hay que ponerle freno a esta lógica donde unos pocos se enriquecen mientras la mayoría paga el ajuste”

El diputado nacional presentó ayer, en el programa Pasaron Cosas de Alejandro Bercovich, el nuevo proyecto de Impuesto a las Grandes Transferencias Internacionales de Capital. Una propuesta concreta que penalice las salidas de divisas que no generan empleo ni valor en el país.
“Entre abril y agosto de este año se fugaron 18 mil millones de dólares”, afirmó el compañero durante la entrevista, y agregó: “Eso no puede seguir pasando sin consecuencias, hay que ponerle freno a esta lógica donde unos pocos se enriquecen mientras la mayoría paga el ajuste”. En un contexto de ajuste feroz, desregulación total y desfinanciamiento del Estado, Máximo propone una salida concreta que penalice las grandes transferencias de capital que no generan empleo ni valor en el país. El proyecto está pensado como una herramienta de soberanía económica y justicia fiscal, en un momento donde los fondos para salud, educación y seguridad social están siendo recortados al límite.
El Impuesto a las Grandes Transferencias Internacionales de Capital apunta a los flujos financieros que hoy se van del país sin dejar nada. No afecta al qué importa ni al que invierte; no grava al trabajador ni a las pymes. Está enfocado en quienes tienen estructura y patrimonio para mover millones al exterior, ya sea por el mercado oficial, el contado con liquidación o a través de criptoactivos. “No se trata de castigar, se trata de corregir una desigualdad estructural”, explicó Máximo, y agregó: “El que se lleva riqueza del país sin generar empleo, tiene que devolver una parte para reparar el daño que deja”.
Argentina se convirtió, en 2024, en el país con mayor uso de criptoactivos en América Latina, con operaciones por más de 91mil millones de dólares, en su mayoría fuera del control estatal. Lo que se recaude a través del proyecto impulsado por el compañero prevé asignaciones específicas para el Hospital Garrahan y hospitales SAMIC; universidades públicas (becas, infraestructura y recomposición salarial); jubilaciones y bonos previsionales (ANSES), PAMI y políticas de discapacidad, Provincias y municipio (con partidas para salud, educación, vivienda y vialidad) y recomposiciones salariales del personal de salud y educación pública.